Uganda es uno de los pocos países del mundo con café autóctono, y Coffea canephora crece de forma silvestre alrededor del lago Victoria. De esta manera, es una parte enorme de la economía de exportación del país, el cual es uno de los mayores productores de café del mundo. Sin embargo, como una gran cantidad de este es Robusta, Uganda ha luchado por lograr una reputación de calidad.

Aunque los cultivos autóctonos de C. canephora habían sido parte de la cultura de la nación durante cientos de años, el café no era originalmente parte de su industria agrícola. A principios de la década de 1900, se introdujo el Arábica, es probable que desde Malawi y Etiopía, pero a esta plántula no le fue bien y luchó contra las enfermedades. Casi al mismo tiempo hubo un aumento en el cultivo de Robusta y la variedad más resistente a las enfermedades pareció florecer.

En 1925, el café representaba solo el uno por ciento de las exportaciones de Uganda, pero se consideraba un producto importante y adecuado para el creciente número de pequeños agricultores. A continuación, en 1929 se estableció la Junta de la Industria del Café. La agricultura cooperativa actuó como un catalizador para el crecimiento del sector y en la década de 1940 el cafeto se convirtió en la principal exportación del país. Después de la independencia, el gobierno aprobó una Ley del Café en 1969 que otorgó a la organización un control total sobre los precios.

El café siguió siendo una industria fuerte durante el régimen de Idi Amin, impulsado sobre todo por el aumento global de los precios que fue causado por las heladas en Brasil en 1975. Además, en la década de los ochenta todavía era el cultivo comercial más fuerte y la producción creció. Dicho esto, también se pasó de contrabando una cantidad cada vez mayor de cafetales a través de las fronteras hacia los países vecinos para venderlo a un precio más alto que el exigido por el gobierno.

A propósito, en 1988, la Junta de la Industria del Café aumentó los precios que pagaba a los agricultores, pero a finales de año estaba profundamente endeudada y el gobierno tuvo que rescatarla. El colapso del Acuerdo Internacional del Café (International Coffee Agreement) en 1989 provocó una caída dramática de los costos y la administración del país devaluó el chelín ugandés en un esfuerzo por hacer que las exportaciones fueran más atractivas a nivel mundial. A pesar de toda la energía invertida, en 1990 la producción se redujo en un veinte por ciento, no solo por los precios, sino también por la sequía y el cambio del café a otros cultivos de subsistencia.

En los años previos al colapso, las plantas de Arábica estaban comenzando a reintroducirse en Uganda a mayor escala, ya que las técnicas agrícolas modernas podían proteger mejor la delicada planta de entornos más duros y evitar enfermedades. Así mismo, este fue también el momento en que los agricultores comenzaron a darse cuenta de los climas ideales en las fronteras este y oeste del país, donde Coffea arabica podía prosperar en altitudes superiores entre otros cultivos y bajo la sombra de los árboles. Aunque todavía no crece a la misma escala que la especie Robusta, la producción de Arábica en el territorio ha crecido de manera constante durante los últimos 40 años. A medida que ha mejorado su rendimiento, también lo ha hecho su reputación, calidad y atractivo.

Para la década de 1990, la industria se había liberado cada vez más, y el gobierno solo desempeñaba un papel de apoyo en el marketing y el desarrollo. Desde aquí podemos trazar una línea bastante recta hacia la industria cafetera actual. Por su parte, la Autoridad de Desarrollo del Café de Uganda ha seguido flexibilizando las reglas, permitiendo una mejor trazabilidad y un acceso más fácil a los granos ugandeses. Los grupos de productores están construyendo sus propias marcas y reputación en mayor medida.

Si bien Robusta sigue siendo el principal producto de exportación cafetalera, el país se está labrando una reputación de buena calidad con respecto a esta especie. La producción de Arábica todavía es relativamente pequeña, pero la calidad está aumentando. En los próximos años, es probable que los cafés de Uganda desempeñen un papel más importante en el mundo de las especialidades.

Procesamiento

En Uganda, el método de procesamiento más comúnmente utilizado en la producción de café Arábica se divide de manera bastante uniforme en este y oeste. De tal modo, cerca del volcán Monte Elgon en el este, los granos se someten en gran parte a un proceso de lavado, mientras que las variedades que se cultivan cerca de las montañas Rwenzori, en el oeste, se procesa de forma natural. La distinción significa que los cafetos plantados en el este suelen ser más suaves, limpios y con una acidez más parecida al vino, mientras que aquellos cosechados en el oeste se inclinan hacia notas frutales pesadas, cuerpos más grandes y sabores de chocolate.

Trazabilidad

Generalmente, los mejores cafés de Uganda provienen de grupos de productores o cooperativas. Hay dos términos exclusivos del sector cafetero de la nación: Wugar (Arábica de Uganda lavado) y Drugar (Arábica de Uganda seco). Asimismo, el país produce granos casi todo el año, y la mayoría de las áreas tienen un cultivo principal y uno secundario más pequeño conocido como “cosecha traviesa” (en inglés, flycrop).

Perfil de Sabor

El café excepcional ugandés todavía es bastante raro, pero las tazas más destacadas son dulces, llenas de frutas oscuras y tienen un acabado limpio.

Regiones de Cultivo

Número de sacos de 60 kg en 2020: 5.620.000

Las regiones en crecimiento en Uganda no siempre están bien o claramente definidas y acordadas.

Bugisu

Esta región tiene la mejor reputación por su calidad, en particular el área alrededor del Monte Elgon, cerca de la frontera con Kenia. Sin embargo, las granjas se encuentran en pendientes pronunciadas y la falta de infraestructura puede resultar un desafío. La zona tiene el suelo, la altitud y el clima para producir excelentes variedades.

Altitud: 1500-2300 m

Cosecha: octubre-marzo (cosecha principal), mayo-julio (cosecha traviesa)

Variedades: Kent, Típica, SL-14, SL-28

Nilo Del Oeste

Mayormente, el café Arábica crece en el noroeste del país, al norte del lago Albert, frente al  territorio limítrofe con la República Democrática del Congo. Los cultivos de Arábica crecen más cerca del lago, con Robusta produciéndose más al norte.

Altitud: 1450-1800 m

Cosecha: octubre-enero (cosecha principal), abril-junio (cosecha traviesa)

Variedades: Kent, Típica, SL-14, SL-28, Robusta nativa

Uganda Occidental

La mayor producción cafetera se encuentra en las montañas Rwenzori, en la frontera con la República Democrática del Congo. Es común ver cafés procesados ​​naturalmente (los Drugars) salidos de esta región.

Altitud: 1200 a 2200 m

Cosecha: abril-julio (cosecha principal), octubre-enero (cosecha traviesa)

Variedades: Kent, Típica, SL-14, SL-28, Robusta nativa

Tierras Bajas Centrales

Como se ha mencionado, Robusta crece en gran parte de Uganda, hasta la cuenca del lago Victoria. Las altitudes son mucho más bajas y los cultivos dependen de una buena lluvia. No obstante, acá encontramos Tuzza, una variedad de Catimor moderna que se cosecha en las regiones de menor altura y la cual es resistente a las enfermedades.

Altitud: 1200 a 1500 m

Cosecha: noviembre-febrero (cosecha principal), mayo-agosto (cosecha traviesa)

Variedades: Robusta nativa, algo de Tuzza